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Dueños de locales comerciales aseguran que a la escasez se le sumaron las barricadas
Los rumores, las barricadas y los constantes disturbios han provocado que muchos comerciantes de la ciudad de Valencia decidan mantener sus negocios cerrados por lo que los tienen que peregrinar por los abastos abiertos en busca de alimentos.Dueños de locales comerciales aseguran que a la endémica escasez se le sumaron las barricadas que proveedores lleguen hasta sus negocios. Otros se muestran casados de las rutinarias inspecciones de funcionarios que buscan comida acaparada y algunos temen posibles saqueos de los colectivos armados.Juan Manuel García, vecino de la urbanización Prebo, afirmó que desde hace un mes no dispone de aceite comestible, mantequilla y le quedan en su alacena dos paquetes de harina de maíz. 'Yo estoy cansado de hacer cola para todo. De nada vale que abran los abastos porque no consigues nada', señaló el lugareño cuando recorría el Centro Comercial Garibaldi. En los últimos días en Valencia las protestas las llevan como consigna la lucha contra el desabastecimiento. La señora Candelaria Barrios, sostuvo que ahora no hay comida ni plata, pues los cajeros automaticos estan apagados porque las barricadas impiden que lleguen los camiones blindados para alimentarlos de billetes. Las colas en los abastos son enormes y en algunos casos se reportan incidentes.
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