|
|
La presidenta argentina, Cristina Fernandez, asistió este miércoles a un misa de inicio de la Cuaresma celebrada en un barrio precario de Buenos Aires, donde se oró especialmente por el presidente venezolano Hugo Chavez, al cumplirse un año de su fallecimiento.
'¡Viva la Iglesia, viva la Virgen, viva el papa, viva Chavez y viva Cristina!', exclamó la guía de la misa al concluir la celebración litúrgica, entre cantos a la Virgen que la presidenta argentina bailó con entusiasmo junto a vecinos del lugar.
Fernandez estuvo en la primera fila de los asistentes, sobre un escenario donde se colocó el altar, a las puertas de la iglesia Virgen de Caacupé, en la Villa 21 de Buenos Aires, uno de los barrios mas pobres de la capital y donde los denominados 'curas villeros' ejercen su labor pastoral. 'A Hugo Chavez lo custodia definitivamente su pueblo', dijo a periodistas la mandataria argentina, vestida enteramente de blanco y con una flor, también blanca, en la cabeza, al concluir la celebración religiosa.
En la homilía de la misa del Miércoles de Ceniza, que marca el inicio de la Cuaresma, el sacerdote Lorenzo 'Toto' de Vedia dijo que en la celebración se rezaba especialmente por Chavez a petición de Cristina Fernandez.
'En este mismo lugar celebró misa tantas veces el actual papa Francisco, en este barrio obrero, porción de la querida patria grande que soñaron nuestros mayores. Dios quiso bendecir al mundo con este papa que llega desde este continente de la esperanza', sostuvo el sacerdote.
'Los pueblos de América Latina estamos fuertemente unidos por la fe que nos dieron nuestros mayores, fe que también profesó Hugo Chavez y que lo llevó a soñar a trabajar por un socialismo humano y cristiano', añadió De Vedia.
Con tono festivo, Fernandez siguió la celebración acompañando con palmas las canciones y tomandose fotos con niños y mujeres que se acercaban a saludarla al altar, rodeado de una multitud donde se mezclaron feligreses y militantes de organizaciones políticas de izquierda portando banderas socialistas.
Junto a Fernandez estuvieron la ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, el titular de la Secretaría de Programación para la Prevención de La Drogadicción y la Lucha contra el Narcotrafico, el sacerdote Juan Carlos Molina, el embajador de Venezuela en Buenos Aires, Carlos Eduardo Martínez Mendoza, y el embajador de Paraguay, el expresidente Nicanor Duarte Frutos.
Al finalizar la misa, los sacerdotes le obsequiaron a Cristina Fernandez un ejemplar de 'Cuerpo a cuerpo', libro sobre el Hogar de Cristo en los barrios pobres de Buenos Aires, y un vecino le regaló una imagen de la Virgen de Caacupé, patrona de Paraguay.
REGRESAR |
*** noticias no disponibles *** |
|