Aunque la razón social del comercio es una panadería, en realidad vende de todo menos pan. Argumentan que la ausencia responde a la gran irregularidad en la distribución de harina que se ha agravado en los últimos meses.Sin embargo, a pesar de la insuficiencia en la importación de trigo, que en efecto han venido denunciando las empresas encargadas de ese ramo, estos establecimientos tienen harina para producir dulces, panes saborizados y delicateses, pero no para producir panes salados, que es lo que mas consume la población.La panadería Juvemar en Baruta (Mir), compra dos veces a la semana un saco de harina en Bs 45 mil, a pesar de que el precio regulado es de Bs 6 mil, es decir, siete veces menor.Con esa harina se producen: tortas (Bs 3.200 el kilo) y cada torta que venden pesa entre 1 y tres kilos; pasta seca (Bs 3 mil el kilo), dulces fríos grandes (Bs 400) y pequeños (Bs 350), cachitos (Bs 500) y pizzas familiares según el tamaño -la mas grande cuesta (Bs 5.900)-. Ademas, panes de tipo campesino (Bs 400) e integral (Bs 890). Los panes simples (tipo canilla) solo se hacen una vez al día y en sus horas específicas a las 11 am y a las 4 pm. El dueño de ese establecimiento aseguró que es mas rentable vender otros productos, que tienen basicamente la misma preparación, pero cuyo precio es mucho mas elevado (fuera de regulación). 'Los molinos nacionales procesan el trigo y venden la harina al precio oficial a un puñado de compradores', dijo. Al salir del molino, la harina aumenta su precio en cada eslabón de la cadena especulativa: el distribuidor pone el precio que quiere y, a su vez, cada comerciante hace lo propio sin importar el consumidor final. En la ciudad capital, los precios de los panes varían según la zona. Un pan campesino oscila entre Bs 800 en La Lagunita y Bs 350 en la parroquia Altagracia, cuando se consigue. Por lo general, en el Oeste de la ciudad se consiguen con mas facilidad panes dulces y andinos un poco mas baratos.... REGRESAR |