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A María García le gusta guardar las distancias cuando utiliza el Metro de Caracas. Si alguien cruza los límites imaginarios de su espacio personal, '¡pafff!', se activan sus alarmas. 'Ni siquiera la seguridad está garantizada en los vagones o en el andén'.
Desde que nació el sistema, por allá por 1983, ella se ha montado en la estación Propatria. Así que como conoce el servicio, es capaz de explicar cómo el paso de los años y el aumento del número de usuarios ha corroído el sistema.
La mañana del 10 de septiembre de 2009, García volvió a montarse en el mismo vagón de siempre y también volvió a protestar. 'No es justo que me toque esperar media hora por el tren y que una vez que logré entrar, me manden a bajar porque hay una falla técnica'.
'¿Una falla técnica? ¿Una sola?', se pregunta. '¡Qué va! Hay más de una y parece que no las ven', se responde a sí misma y comienza la enumeración con los dedos de ambas manos.
'El aire de los vagones está dañado', cuenta el uno con el pulgar derecho. 'Las escaleras no sirven', dos con el índice. 'Tardo entre una hora y una hora y media para abordar. El sistema está colapsado y nada que hacen nuevas estaciones', va por el dedo medio. 'Hoy ya me han mandado a bajar dos veces del vagón', sigue con el anular. 'Ya ni siquiera anuncian las paradas en la línea uno', viene el meñique. 'Si te descuidas, te abren la cartera', va con el pulgar izquierdo. 'Los torniquetes no sirven todos. Entonces tienes que adivinar', marca la falla número siete con el otro índice.
Cuando el Metro de Caracas arrancó con el primer tramo de seis estaciones, de Propatria a La Hoyada, circulaban al día en el sistema 183.834 personas, según las estadísticas de la página www.metrodecaracas.com.ve.
En 2008, la cifra se incrementó 782%. Así, en total, el año pasado circularon a diario por el sistema 1.623.216 usuarios. La tendencia sigue siendo al aumento de beneficiarios.
Sin embargo, en un recorrido rápido por el mapa de líneas del sistema, puede contarse que entre 1983 y 1999, sólo dos presidentes José González Lander e Ignacio Combella levantaron 39 estaciones. De ahí en adelante, se han sentado en la silla presidencial 11 directivos, quienes pese al incremento en 782% en la circulación de pasajeros sólo han inaugurado unas cinco estaciones más. El resto está 'en ejecución'.
Un, dos, tres Desde 1999 hasta septiembre de 2009, el sistema ha tenido 11 cabezas al mando. Con suerte, Orlando Zoghby Pérez permaneció en el cargo dos años; Gustavo González duró tres. El resto, no superó los 365 días de gestión.
'La corta estancia de los presidentes del Metro de Caracas es un factor que ha marcado el deterioro del sistema', explica el diputado y presidente de la Federación de Trabajadores Ferroviarios, Francisco Torrealba. 'Se requiere garantizar la continuidad de los directivos para que se concreten los planes propuestos'.
Su aspiración como la de los delegados sindicales, dice, es que el presidente actual, Víctor Hugo Matute, 'permanezca el tiempo suficiente en el cargo para que
El actual presidente del Metro, Víctor Matute, se negó a dar una entrevista a este diario. La orden incluso bajó a sus trabajadores. En la estación Petare, el supervisor de las 'brigadas socialistas' regañó a una empleada que declaraba y solicitó, infructuosamente, a la autora de este reportaje la entrega de su libreta. Las empleadas afirmaron ser 'demasiado socialistas para declarar a la Cadena Capriles'.
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pueda resolver asuntos que han venido rezagándose, como el mantenimiento de la Línea 1'.
Si se mete en Google el nombre de un ex presidente del Metro de Caracas, se despliega una lista de noticias que reseñan las labores de rutina de los directivos, pero no obras de gran envergadura.
Del presidente actual, Víctor Hugo Matute quien se negó a hablar con El Mundo Economía y Negocios, igual que Claudio Farías, se sabe que sustituyó las losas de la vía férrea desde Chacaíto hasta los Dos Caminos.
A Gustavo González López (presidente entre 2006 y enero de 2009) le tocó dar la cara por el Metro de Caracas con el primer accidente fatal en los 24 años de funcionamiento del sistema. Dos trenes que llegaban a la estación Plaza Sucre a las nueve de la mañana del 30 de julio de 2007, chocaron.
El saldo: un muerto (Zulay Ramírez de Asturillo) y 14 heridos.
De Dolores González, cuenta Radio Nacional de Venezuela que el 23 de febrero de 2005, habría ordenado encender los ventiladores de las estaciones Ciudad Universitaria y Los Símbolos para 'poner a tono' los equipos de las Líneas 3 y 4.
La decadencia 'Estación Petare', canta una voz en off. En off también están los torniquetes para salir de la estación. De 12 sólo sirven cinco. En off están las máquinas de ventas de boletos que, en español y en inglés, llevan un letrero que dice 'fuera de servicio'/ 'out of service'. Las escaleras son otras que están en off. Al menos ese día el 10 de septiembre de 2009, había que subir a la calle a pie.
Y aunque la mayoría de las cosas en Petare están en off, las patrullas socialistas intentan estar prestas para hacer que las cosas que están a su alcance, anden. Son todas mujeres entre 25 y 35 años, empleadas del Metro de Caracas.
Ellas deben atender a los usuarios perdidos o con discapacidades, recorrer andenes para evitar irregularidades, abordar a los que tienen malos hábitos, desalojar trenes que se detienen, atender los casos de robos y que los usuarios no dañen aún más los torniquetes...
En fin, lidian con las fallas del Metro de Caracas y otras cosas más.
'Ellas no pueden hacer nada', lamenta Klaus Pertok, un usuario que va saliendo de la estación Chacaíto. 'El servicio ha empeorado tanto...'. Él mismo, tiene un amigo que incluso quedó atrapado en un tren dentro del túnel, luego de uno de los apagones.
'Tuvieron que caminar para llegar a la estación. Estuvieron más de una hora dentro del vagón'.
Biagni Pereira, otra usuaria, también sufre a diario los inconvenientes del Metro. Vivió también uno de los apagones. 'El tren se detenía cada media hora en las estaciones, lo cual era horrible porque no había aire'. Al final, como muchos, se bajó donde pudo y utilizó otro medio de transporte público.
María García ya va dejando la estación Plaza Venezuela. Como una usuaria fiel del Metro de Caracas, dice esperar que las cosas mejoren. 'Cada vez seremos más quienes nos montemos en el Metro. O lo arreglan o el servicio está destinado a desaparecer con el aumento de usuarios, pues es de los medios más económicos REGRESAR |
| Fecha publicada: 29/09/2009
Fuente: El Mundo
Tema: transporte
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