El presidente venezolano Hugo Chávez dijo ayer que la acería Ternium debe desistir de sus aspiraciones de obtener inmunidad en el acuerdo por la nacionalización de su unidad local en el país, con el objetivo de no enfrentar sanciones legales.
Ternium, propiedad del grupo argentino Techint, expresó horas antes que esperaba retomar las conversaciones por la estatización y aspiraba a una compensación justa por sus activos -60% de Sidor- mientras corren las últimas dos semanas de plazo para las negociaciones.
'Nos piden, para ellos firmar el documento, que la República les garantice inmunidad ante cualquier reclamo posterior. Si yo hiciera eso, estaría violando la Constitución', señaló Chávez.
Aseguró que 'iremos a juicio, pero si es así (...) quitémosle hasta el último tornillito de lo que tienen aquí y no quiero ni verlos en Venezuela', luego de recorrer Sidor con su homólogo de Ecuador, Rafael Correa.
'Entonces, iríamos a fondo con los daños ambientales, iríamos a fondo con los miles de millones de dólares que no pagaron aquí en impuestos durante mucho tiempo', agregó Chávez, antes de asegurar que espera un acuerdo amistoso.
El Mandatario precisó que con un acuerdo la empresa podría seguir operando como socia o con filiales en Venezuela y afirmó que ambas partes habían acordado el avalúo de los activos, pero que diferían en el tema de la impunidad. Días antes, reveló que enfrentaban problemas para lograr un acuerdo y que no realizaría un pago inmediato por Sidor.
Ternium había dicho que todavía estaba en negociaciones con Venezuela, luego de que versiones de prensa reportaran que se había pactado el pago de $1.650 millones por 50% de la empresa, con lo cual el conglomerado se quedaría con 10%. REGRESAR |