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Los hispano venezolanos afectados por las expropiaciones de tierras que adelanta el gobierno de Hugo Chávez no se hacen grandes ilusiones respecto a la solución de este problema, y se muestran escépticos ante las posibles soluciones ofrecidas por el gobierno venezolano al ministro de exteriores español, Miguel Ángel Moratinos, en el marco de su visita a Venezuela la pasada semana .Actualmente viven en Venezuela unos 200 ciudadanos con la doble nacionalidad española y venezolana, entre quienes figuran numerosos descendientes de canarios, afectados por la expropiación de aproximadamente 200.000 hectáreas. La problemática fue abordada con las autoridades venezolanas durante la visita de Moratinos al país, previa reunión del dirigente español con los afectados españoles y canarios residentes en el territorio venezolano. Por la experiencia vivida en la presente década los afectados manifiestan recelo ante las medidas anunciadas, un recelo supeditado a que efectivamente el mandatario venezolano asuma el compromiso de solucionar el problema. En caso de que no se vean avances en la búsqueda de una solución definitiva, los hispanos venezolanos volverían a pedir la ayuda del Senado español. De las diligencias que han venido realizando para recuperar sus tierras, han entendido que una cosa es lo que las autoridades venezolanas dicen en el marco de un compromiso político, y otra muy distinta la realidad a la que se enfrentan al acudir ante los funcionarios competentes designados para tratar el problema directamente con ellos. Los españoles expropiados o invadidos aspiran a que, por lo menos, el gobierno les indemnice por los daños causados. Para ello confían en la mediación del gobierno español ante el de Venezuela. Otra aspiración de este sector es que España haga respetar el acuerdo bilateral suscrito con Venezuela en 1997 para la protección recíproca de las inversiones REGRESAR |
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